- Participan en la categoría de platillo de rescate con la Atapakua con corundas
Oaxaca, Oaxaca, Septiembre del 2019. – La magia y la riqueza nutricional de la gastronomía purépecha, fue llevada por estudiantes del Instituto de Capacitación para el Trabajo del Estado de Michoacán (Icatmi), al Séptimo Concurso Gastronómico de los Institutos de Capacitación para el Trabajo que se celebra en Oaxaca.
Con la tradicional Atapakua con corundas, la cual es acompañada de una profunda investigación sobre los productos ancestrales que las mujeres utilizaban en temporada de lluvias para limpiar el organismo y prepararlo para los productos de la nueva temporada agrícola.
Aunado a ello las participantes presentan la indumentaria y loza tradicional, informó Rosario Cruz García, directora general del Icatmi.
Las estudiantes que participan en la categoría de platillo de rescate, señalaron que la gastronomía es para la población purépecha parte esencial de su cultura, que es trasmitida y supervisada por las Nana k´eri (abuelas), quienes daban los procedimientos y el toque final. Los alimentos con que se elaboraban los platillos, provienen del solar o granja de traspatio, explicó Josefina Márquez Valdez.
En las cocinas del Icatmi, “nos enseñan a investigar sobre el contexto histórico, pero también sobre la tradición gastronómica cultural. La Atapakua es un platillo que se elabora con productos que uno tiene a la mano, gracias a la yerbabuena y al cilantro cambia el PH del estómago y lo limpia, se utiliza poskua (maíz seleccionado) para engrosar el caldo y con ello se le rinde honor a Xaratanga, deidad de la agricultura”, destacó la estudiante de origen purépecha.
La Atapakua, se sirve con corundas de cinco picos, las cuales son realizadas en las festividades por las mujeres casadas. En su explicación, la estudiante Xóchitl Herrejón, señaló que las corundas son un platillo emblemático de Michoacán, que se sirve en las festividades donde familiares y vecinas asisten a apoyar en los preparativos. Las corundas de tres picos son realizadas por las mujeres solteras, agregó Adriana Quiroz.
La vajilla que se utiliza es propia para la Atapakua, ya que no se emplean cubiertos y está elaborada en Capula y otra parte de Tzintzuntzan. Paralelamente a la presentación de los platillos, que son servidos por una princesa purépecha a los jurados, las estudiantes que no participan en esta categoría, realizan la representación de la danza de los viejitos con indumentaria propia de las distintas regiones purépechas.