Por: Carlos Alberto Monge Montaño.
Latentes las plazas automáticas…
“Todos somos iguales ante la ley, pero no ante los encargados de aplicarla”. Stanislaw Jerzy Lec (1909-1966) Escritor polaco.
Debido a la presión que ejerce la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación para mantener la rectoría en la asignación de las plazas magisteriales, la Cámara Federal de Diputados no ha alcanzado los acuerdos necesarios para aprobar las leyes secundarias de la Reforma Educativa, que tienen como plazo el 12 de septiembre.
Sin el menor escrúpulo y fieles a su tradicional ausencia de palabra, los legisladores violentarán los tiempos legales que ellos mismos establecieron para aprobar las leyes General de Educación, General del Sistema para la carrera de las Maestras y Maestros, y la del Organismo para la Mejora Continua de la Educación.
Los coordinadores parlamentarios de Morena y PAN, Mario Delgado Carrillo y Juan Carlos Romero Hicks, respectivamente, coincidieron en que resulta prácticamente imposible cumplir con la norma y aprobar dichas leyes reglamentaras el próximo jueves, así que la meta ahora es que no pase de septiembre.
Mientras tanto, representantes de los profesores democráticos de Michoacán y Oaxaca, se reunieron de nueva cuenta con el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, a quien entre otras cosas, le han pedido participar de la asignación de plazas.
Una de las mayores luchas de la CNTE y sus fuerzas básicas, los normalistas, es que regrese la entrega automática de plazas, por lo que seguramente insistirán con sus esquemas de “lucha” hasta lograr el objetivo.
De momento, organizaciones como Mexicanos Primero han alertado del riesgo que prevalece de violentar el artículo tercero de la Constitución Mexicana que privilegia el principio de la equidad, si se otorgan las plazas automáticas o incluso, si dan prioridad a los egresados de las escuelas normales y la Universidad Pedagógica Nacional, como establece una propuesta. Destacan que los sindicatos tampoco deben participar en ninguno de los procesos de selección, administración o promoción.
El riesgo de las plazas automáticas está latente, especialmente cuando los profesores inconformes saben que las autoridades vigentes federales y estatales, son incapaces de hacer respetar el Estado de Derecho, dicho de otra manera, las leyes vigentes del país, con las CNTE y los normalistas, no aplican. Por ello seguramente el diputado morenista Mario Delgado señaló que no cometerán los errores del pasado, como legislar sin el consenso del magisterio, porque resulta contraproducente.
Veremos pues si los legisladores federales se atreven a reglamentar que las plazas magisteriales se entreguen en un evento público, con base a evaluaciones y total equidad, para hacer valer su dicho de cero corrupción y cuidar el desarrollo educativo de niños, adolescentes y jóvenes mexicanos.
Memoria…
A propósito de la propuesta de Ley de Ingresos que mandó el Ejecutivo Federal para el próximo año, resulta que no incluye quitar el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), lo cual permitiría que el litro de las gasolinas disminuyera en un aproximado de 4 pesos, como tantas veces y acertadamente lo señaló el entonces candidato y/o líder partidista de oposición, Andrés Manuel López Obrador.
Lamentablemente deja claro que es un político más, que se parece demasiado a los “neoliberales” que tanto ha criticado. Simple, ahora que tiene el sartén por el mango, ha decidido mantener el IEPS.
Le recuerdo algunas de las ocasiones en que habló al respecto:
En agosto de 2016 destacó como patético, que “la gasolina en nuestro país es más cara que en Guatemala y Guatemala no tienen petróleo, ¿por qué este absurdo?, por la corrupción que existe en nuestro país, están retorciendo el pescuezo a la gallina de los huevos de oro… jugosos negocios privados al amparo del poder público, pura robadera”. Y cuestionaba “¿cómo va a crecer la economía si en México vale más la gasolina que en otras partes del mundo?”
En enero de 2017 presumió que la entonces diputada federal por Morena, Rocío Nahle García, solicitaría a la “Comisión Permanente que se convoque un periodo extraordinario de sesiones, para reformar la Ley de Ingresos y revertir el aumento en las gasolinas, gas, diesel y energía eléctrica… Morena fue el único partido que no aprobó en diciembre esa Ley de Ingresos que contempla el aumento a los impuestos a las gasolinas”.
Luego, en marzo de 2017 señaló desde el Paso Texas en el vecino país del norte, que “la gasolina aquí (vale) 2.17 dólares el galón, póngalo, son 3.78 litros, significa que aquí la gasolina cuesta once pesos el litro, mientras en nuestro país, la más barata 16 pesos, esto demuestra cómo engañan por la corrupción los gobernantes de nuestro país”. Y argumentó, “ni el Chapo hace un negocio así… roban más los delincuentes de cuello blanco de nuestro país, la corrupción está destruyendo a México, pero todo esto lo vamos a corregir, se va a terminar, ya falta menos para el 2018”.
No descarto que ante las condiciones que prevalecen en nuestro país resulte extraordinariamente complicado quitar o disminuir el IEPS a las gasolinas, pero de ser así, entonces lo menos que queda es un uso perverso del discurso y los compromisos, con el único objetivo de ganar votos, lo que resulta lamentable y una acción habitual de lo más desafortunado de la clase política nacional.
Con la esperanza de que haya una próxima vez… me despido, gracias.
cmongem@hotmail.com