- La esclavitud y la explotación sexual, una realidad, refiere Nuria Hernández, titular de Seimujer
Morelia Michoacán, Julio de 2020.- Una droga solo se puede vender una vez: quien la compra, la consume y se acabó́. Un arma o arsenal solo se vende una vez: quien recibe el dinero no la vuelve a ver. A un ser humano se le puede vender al día 60 veces, y al día siguiente otras 60 veces más, eso es la trata de personas, un delito en el que el 90 por ciento de las víctimas son mujeres.
Lo anterior fue expresado por la secretaria de Igualdad Sustantiva y Desarrollo de las Mujeres (Seimujer), Nuria Gabriela Hernández Abarca, al ofrecer la conferencia en línea “La trata de personas”, en el marco de la conmemoración del día internacional de lucha contra este delito.
“La esclavitud y la explotación de seres humanos nunca han dejado de ser una realidad. Son cotidianas, visibles, toleradas y fomentadas hoy de forma no tan diferente por la pandemia, pero ahí siguen cobrando la vida de miles de personas alrededor del mundo”, afirmó.
Hernández Abarca reconoció que la esclavitud y la explotación sexual dejan ganancias inimaginables a los y las tratantes, pues las víctimas de esos delitos son explotadas una y otra vez, “no importa clase social, color de tez, ni sexo. No importa educación, no importa si en realidad no me importa el tema o no quieres acercarte, ni involucrarme en él. Pensar que a mí no me va a pasar es el principio para ponerme en riesgo al ignorar esta realidad”.
Finalmente recordó que, desde la Seimujer, se da atención y acompañamiento a las víctimas, además se trabaja de manera coordinada con las instituciones responsables de perseguir el delito, “las nuevas formas de comunicación y la pandemia por COVID-19 ha demostrado que las mujeres seguimos siendo las más vulnerables de padecer este delito”.
Son tres las etapas que se pueden identificar en la comisión del delito de trata de personas.
- El primero: la captación, enganche o reclutamiento que refiere al primer momento en que la víctima tiene contacto con el o los tratantes, por medio del engaño, el secuestro, la seducción, matrimonios falsos, a través de internet, por anuncios de empleo, agencias de modelos o redes sociales.
- El segundo: el traslado, que es el acto de llevar a una o más víctimas de un lugar a otro. Cuando es de un Estado del país a otro se conoce como trata interna, cuando es de un país a otro se conoce como trata transnacional.
- La tercera: la explotación representada en diversas formas en las que la o las víctimas del delito pueden ser explotadas.
Las modalidades en las que se presenta el delito de trata de personas son: utilización de personas menores de dieciocho años en actividades delictivas, tráfico de órganos, tejidos y células de seres humanos vivos, prostitución ajena u otras formas de explotación sexual, experimentación biomédica ilícita en seres humanos, adopción ilegal de personas menores de edad, matrimonio forzoso o servil, trabajo o servicios forzados, condición de siervo, explotación laboral, mendicidad forzosa y esclavitud.