- Al conmemorarse el Día Internacional de los Bosques, recordó que en Michoacán durante las últimas tres décadas se ha perdido cerca del 70 por ciento de la superficie boscosa
Morelia Michoacán, marzo del 2022.- El cuidado de nuestros bosques es un tema prioritario sobre el que no puede bajarse la guardia, ya que éste es vital para garantizar la calidad de vida de todas y todos, recalcó la diputada Fanny Arreola Pichardo, coordinadora de la Representación Parlamentaria de la LXXV Legislatura del Congreso del Estado.
Al conmemorarse este 21 de marzo el Día Internacional de los Bosques, la diputada por el Distrito de Apatzingán recordó que en Michoacán durante las últimas tres décadas se ha perdido cerca del 70 por ciento de la superficie boscosa.
“El cambio de uso de suelo se ha convertido hoy día el mayor problema en los procesos de deforestación en nuestro estado, lo que ha venido a impactar ya de manera muy notoria el clima, la disposición de agua, la vida de flora y fauna, ya que sin bosques la vida como la conocemos hasta ahora será distinta”.
Fanny Arreola señaló que el Día Internacional de los Bosques busca este año ahondar la reflexión y la discusión sobre la necesidad de éstos para asegurar una producción y consumo sostenibles.
Expresó que nuestro país es uno de los diez del mundo con mayor superficie de bosques primarios, además de que en territorio nacional se registran todos los tipos de vegetación natural conocidos.
“Sin embargo han fallado las políticas de protección y preservación, a tal punto que, en una década, nuestro país registró la pérdida de 602 mil hectáreas de bosques primarios, situación a todas luces escandalosa”.
La legisladora recalcó que en la medida en que las autoridades de los tres niveles de gobierno no asuman con seriedad la importancia en el cuidado de nuestros bosques, estaremos condicionando las posibilidades de desarrollo.
Asimismo, Fanny Arreola apuntó que las principales causas de la deforestación en México son el incremento de la frontera agrícola y ganadera; la tala ilegal y los incendios forestales; la expansión de áreas urbanas e industriales; las plagas y las enfermedades de los árboles.