Morelia, Michoacán, Mayo de 2019.- En aras de proteger de riesgos de intoxicaciones a los jornaleros agrícolas y a las personas que fabrican, distribuyen o venden plaguicidas y fertilizantes, la Secretaría de Salud de Michoacán (SSM), a través de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coepris), capacitó a productores y jornaleros de Zitácuaro y La Piedad con el curso Buen Uso y Manejo de Agroquímicos (BUMA).
Lo anterior con el apoyo del Comité Estatal de Sanidad Vegetal (CESAVEMICH); el curso está dirigido a agricultores, jornaleros, proveedores de fertilizantes, propietarios de parcelas y aplicadores de plaguicidas, con el objeto de instruirlos en temas relacionados con la manera en que debe de usarse el equipo adecuado para la protección personal, y sobre primeros auxilios en caso de intoxicaciones por agroquímicos.
Este curso fue inaugurado por Carlos Zarco Rodríguez, jefe del Departamento de Fomento Sanitario de la Coepris, en presencia de Jaime García Hurtado, jefe de la Jurisdicción Sanitaria de Zitácuaro y de Selene Arriaga Mondragón, Coordinadora Jurisdiccional para la Protección contra Riesgos Sanitarios también de Zitácuaro.
Con estos talleres, los asistentes fueron instruidos en las reglas para el transporte adecuado de los agroquímicos y en su almacenado correcto, ya que es necesario que cuenten con un espacio o bodega especial, para que no sea en el interior de un cuarto de alguna vivienda, y se pueda evitar así la intoxicación del personal y sus familias.
A los proveedores de plaguicidas se les explicó que su personal debe ser capacitado y que la bodega debe contar con ventilación, estar bajo llave, ser libre de derrames y tener lavador de ojos, las maneras en las que pueden detectar a tiempo una posible intoxicación y los primeros auxilios que deben tener.
Es necesario que los proveedores y agricultores que utilizan agroquímicos no tiren al cesto convencional los envases una vez que ya están vacíos, sino que los enjuaguen con agua y el contenido lo apliquen en los cultivos, para que no desperdicien ni contaminen el medio ambiente si lo vierten a la alcantarilla.
Después, estos envases se deben perforar, para evitar que alguien los utilice como recipientes para almacenar o tomar líquidos, pues al hacerlo estarían intoxicándose. Estos recipientes ya lavados y perforados se deben depositar en centros de acopio primarios o contenedores, también conocidos como Centros de Recolección de Envases Vacíos (Crevas) y los domicilios se pueden solicitar en los Comités Estatales de Sanidad Vegetal del Estado de Michoacán (Cesavemich).
Con cursos y capacitaciones, la Secretaría de Salud coadyuva a que los agricultores detecten a tiempo los síntomas de intoxicación, pues éstos se confunden con un simple dolor de cabeza, y se les exhorta a que acudan a tiempo a su centro de salud más cercano y a que no se auto mediquen.
Los síntomas de la intoxicación son: dolor de cabeza, vómito, malestar, fiebre que comúnmente se confunde con un simple resfriado o infección y no se trata adecuadamente con líquidos y antihistamínicos.