Morelia Michoacán, Diciembre de 2019.- Con el apoyo de la ciencia y la tecnología, productores de mango estarán en posibilidad de ofrecer el producto todo el año, gracias a un trabajo de los laboratorios del Centro de Innovación y Desarrollo Agroalimentario de Michoacán, A.C., CIDAM, en un esfuerzo coordinado con Gobierno del Estado y productores.
En conferencia de prensa la directora ejecutiva del CIDAM, Elisa López Loeza; el Investigador Carlos Sosa Aguirre, la empresaria Itzel Arriaga, de Agumon Exports y el director general del Instituto de Ciencia, Tecnología e Innovación, José Luis Montañez Espinosa, informaron que Michoacán es líder nacional en producción de mango, variedades Ataulfo, Kent, Tommy y Haden, con ciclos de cosecha que van de enero a septiembre. Los precios fluctúan conforme hay mayor o menor producción, pero ahora, con el apoyo de la ciencia, se le dará valor agregado para mantener estabilidad en precios y oferta todo el año.
Ese valor agregado se tradujo en la elaboración de mango en hojuela y en deshidratado: productos que se ofrecen sin saborizantes, colorantes, conservadores o químicos adicionados.
Agumon Exports informó que el producto ya captó la atención de grandes cadenas de distribución europeas, por lo que la venta está lista para arrancar en cuanto entre en operación la planta productora, misma que se instalará en Nuevo Urecho en el primer trimestre del 2020.
Ciclo de cosecha en números:
150 mil toneladas de mango, se producen.
90 mil toneladas se exportan.
750 millones de pesos ingresan.
10 empacadoras y 60 productores reciben transferencia de tecnología.
5000 empleos involucrados.
La mayor parte de la producción de mango se ofrece en fresco, pero, con un valor agregado la ganancia sube al menos 50 por ciento. Destacaron que otra ventaja de agregar valor a la fruta es que además de ofrecerlo durante todo el año, se aprovecha el producto que no cumple con los estándares de exportación.
Cabe señalar que el acompañamiento del CIDAM a esta cadena de producción incluyó la certificación de procesos lograr certificación de exportación, asesoría para la cosecha, así como impulso a la producción de diversas variedades. Las de cáscara roja son más apreciados en el exterior, mientras que en el país es la amarilla.
El proyecto comprendió también aspectos como geoestadística, agricultura de precisión, inocuidad química y microbiológica, hasta aspectos legales y financieros para llevar a cabo la exportación.