- “En mi mente primero imagino la figura que voy a elaborar y sobre eso voy trabajando mi pieza hasta formar una gran estrella”, señala el artesano originario de Tzintzuntzan, quien se ha especializado en elaborar piezas de panikua
Tzintzuntzan, Michoacán, Mayo del 2020.- Antonio Cornelio Rendón es artesano michoacano, originario del Pueblo Mágico de Tzintzuntzan. A muy temprana edad comenzó a trabajar la fibra vegetal y a elaborar piezas de panikua (vara del trigo), aprendiendo este oficio de su abuelo y de su padre, quienes en su casa trabajan artesanías en esta rama artesanal, además de dedicarse junto con su madre al comercio, la agricultura y la pesca.
A la edad de 15 años Antonio comenzó a realizar adornos decorativos para fechas especiales como la Navidad, Semana Santa, entre otras festividades de su localidad. Su inclinación fue por la elaboración de estrellas tejidas, coronas, nacimientos, Cristos, batones, figuras aplanadas, por mencionar algunas.
El talento, creatividad y destreza de Cornelio Rendón lo llevó a incursionar años después con técnicas más laboriosas, a manipular el popotillo (también llamado panikua) con piezas de mayor complejidad y a especializarse en la elaboración de estrellas, con las cuales ha obtenido varios reconocimientos en los concursos artesanales estatales y nacionales, además de que también su artesanía es conocida en algunos países europeos, ya que en el 2012 elaboró piezas para adornar el árbol del Vaticano, en Roma, Italia.
Apasionado por su trabajo, crea en su mente las diferentes figuras de estrellas, así como las proporciones y tamaños. Como se las va imaginando plasma su idea y también sobre las peticiones que el cliente le pida.
“En mi mente primero imagino la figura que voy a elaborar y sobre eso voy trabajando mi pieza hasta formar una gran estrella”, menciona el artesano Antonio.
En 2016, fue uno de los artesano beneficiados por parte de la Secretaría de Turismo Federal, del Fondo Nacional para el Fomento de las Artesanías (Fonart) y el Instituto del Artesano Michoacano (IAM), en coordinación con el Ayuntamiento de Tzintzuntzan, con el programa de “Adecuación de talleres en espacios turísticos”, a través del cual pudo remodelar su taller para que los turistas nacionales y extranjeros que visiten este pueblo mágico, puedan interactuar con él, realizando alguna artesanía de panikua.
Para la tercera edición de la campaña “Valoremos el Trabajo Artesanal” de 2019, en el cortometraje titulado “El Círculo”, el artífice Antonio Cornelio Rendón presentó su creatividad, destreza y pasión sobre su trabajo en la rama de fibras vegetales y mostró el proceso de elaboración de sus piezas.
“Es un gusto el haber participado y ser parte de la campaña Valoremos el Trabajo Artesanal, porque a través de ésta, podemos llegar a más personas que pueden conocer el quehacer artesanal de nuestro Estado, además de conocer todo el proceso que hacemos para que una pieza quede con calidad y las horas que dedicamos a cada producto que creamos”.
El taller del artesano Antonio Cornelio Redón lleva el nombre de “Artesanías de Panikua”, y lo pueden visitar los 365 días del año, en la comunidad de Tzinztzuntzan, en la calle Tariacuri s/n.